Anotá estos consejos y recomendaciones para tener la mejor cosecha de albahaca!
La mejor época para sembrar albahaca es a finales del invierno o comienzos de la primavera, para así poder disfrutar de esta planta durante la mayor parte de año, puesto que se trata de una planta anual que muere en otoño con la llegada de las bajas temperaturas.

Aunque por regla general las semillas de las aromáticas suelen tardar en germinar , si a la albahaca le proporcionamos todos los medios adecuados en menos de una semana podremos ver como empiezan a germinar nuestras semillas, para ello usaremos un buen sustrato para semilleros y el truco fundamental es no enterrar mucho las semillas, parece una tontería pero debemos poner una fina capa de sustrato sin que realmente llegue a cubrir mucho las semillas.
Lo primero para sembrar la albahaca, será preparar la maceta que será de germinador. La planta se puede sembrar en maceta, en una jardinera o sobre una bandeja de alvéolos. En este caso la maceta debe poseer al menos unos 12 centímetros de diámetro para evitar que las plantas germinen muy juntas. Si lo realizamos, en cambio, sobre una bandeja de alvéolos, el tamaño deberá ser al menos de 3 ó 4 centímetros.

RIEGOS Y TEMPERATURA
Para germinar nuestra albahaca desde semilla vamos a proporcionarle buenos riegos, pero ligeros y no hace falta que sean muy seguidos, podremos regar entre cada 3 y 5 días más o menos dependiendo un poco de las temperaturas y el sustrato si se seca mucho. Deberemos llenar el recipiente sin apelmazarlo y regarlo con abundancia. La temperatura debe ser más o menos constante y no menor de 15º durante el día. por eso es ideal germinarla dentro de casa. La siembra consiste en depositar las semillas en el semillero y regarlas con cuidado, evitando que el agua las desplace o entierre
. La distancia entre las plántulas deberá ser de al menos unos dos centímetros, para evitar la competencia por la luz.
La albahaca es una planta que requiere una elevada cantidad de riegos durante todo su cultivo. Si no tiene la suficiente agua, la planta correrá el riesgo de deshidratarse y no llegar a desarrollarse. Para realizar el riego, deberemos mantener la tierra siempre húmeda, pero sin que llegue a encharcarse. Una solución para esto es realizar unos agujeros en el fondo de la maceta para facilitar su drenaje.
